Durante el X Congreso de ASPACK que se celebró del 20 al 23 de octubre en Lisboa. Tuvimos la intervención de Valérie Guillotte, Socia Directora de Kolokio International.
La intervención de Valerie fue la mejor valorado del todo el Congreso, votado por los congresistas vía la APP que creó la asociación para el evento.
“Hagamos entre todos del sector una referencia de desarrollo personal, bienestar, defensa de nuestro planeta… humanicemos nuestro liderazgo, hagamos empresas liberadas”, así cerró el video de Valerie.
Vivimos unos años de cambio entre pandemias, crisis, guerras … en el que tenemos que preguntarnos ¿crees que el trabajo tiene algún impacto en nuestra relación personal?
Desde hace más de 20 años el trabajo pierde su peso central en la construcción de la identidad de las personas en favor de otros aspectos como el ocio, la familia, el desarrollo personal, el deporte, el activismo…
Y a esto hay que añadir el gran cambio del teletrabajo. El 71% de los jóvenes dicen que podrían dejar de trabajar en su empresa si tuviera que volver al presencial 100% según Research institute. La pandemia y la crisis del calentamiento global, han acelerado el deseo de la gente de vivir de otra manera, con mejores horarios, menos estrés y más sentido.Además, se ha situado el tema del bienestar mental en una prioridad absoluta. Así lo confirma la Fundación Alares que nos dice que la implementación de programas de bienestar y salud han aumentado un 95% tras la pandemia.
Hoy en día, el 61% de los empresarios están estresados y trabajan muchas horas por semana. El 72% trabaja más de 40 horas por semana y el 55% siempre responde temas vinculados a su trabajo tras finalizar la jornada laboral. Menos de la mitad (el 47%) duerme siete horas al día.
Como resultado, tenemos un aumento de los burn out o enfermedades vinculadas al estrés.
A causa de esto, el líder debe saber responder a las necesidades psicológicas de su equipo. Mucha gente prefiere ganar menos pero formar parte de un proyecto con sentido donde se sienta valorizado y pueda desarrollar todo su potencial.
Hoy en día los empleados quieren primero, tener un trato considerado, confiado y benevolente. Segundo, Permitir el Desarrollo personal. El humano necesita aprender nuevos conocimientos, desarrollarse. Si detrás de una acción no hay un sentido, la persona se transforma en un robot y pierde una parte importante de su humanidad.
Tercero, Autonomía o el deseo de no estar controlado. Esta sensación empieza en la adolescencia y nunca acaba. A nadie nos gusta sentirnos controlados. Por desgracia, en mucha empresa la palabra confianza se utiliza mucho sin realmente sentirla, vivirla.Si realmente queremos generar confianza, debemos aprender a no controlar.
Cuando en su empresa se respete estas tres condiciones, llegarán las iniciativas y la creatividad por parte de vuestros empleados.
Pero ¿como la empresa se puede transformar?
Solo si el líder pasa por un proceso de transformación personal. Y aprende a liderar de otra manera. No puede existir una empresa que se libere, se transforme sin que el líder tenga una fase de transformación personal. Para ello, hay que parar y aprender a conocerse mejor.
¿Cómo líderes, que debemos hacer para conseguirlo?
1º Limpiar nuestro mental
Eliminar de nuestra mente todas estas creencias que nos limitan en nuestro día a día y que hemos heredados de nuestra educación y cultura. Como dice krishnamurti “hay que liberarnos de lo conocido”.
2º Detectar las experiencias traumáticas
Tenemos que detectar las experiencias traumáticas o reprimidas para desbloquear nuestro flujo y tener la posibilidad de disfrutar de la vida. Hay que saber que las experiencias no aceptadas y que han sido fuente de sufrimiento se congelan y van a provocar siempre una distorsión de la realidad.
3º Saber conectarse con sus emociones
Todos tenemos emociones. Sin embargo, muchas personas por educación o por evitar sufrir se han desconectado de sus emociones. Así que se convierten fríos sin capacidad de empatía. El problema es que estas emociones no expresadas se quedan en memoria en el cuerpo y bloquean el flujo de la energía transformándose en ira, resentimiento, tristeza, miedo…y provoca un comportamiento neurótico.
4º Cuarto es quitarse las mascaras
Con el fin de poder sobrevivir en un ambiente profesional, la mayoría se disfraza para protegerse y evitar demasiado sufrimiento. Si no nos identificamos con esta máscara, no es un grave problema. Sin embargo, si nos confundimos con la máscara perdemos quien somos y podemos caer en graves problemas psicológicos.
Los jóvenes de hoy no quieren tener dos caras. Quieren encontrar una empresa donde pueda ser como es. Así que es importante saber si no nos hemos perdido en nuestra máscara. El peligro es cuando estamos totalmente centrados en este personaje que nos hemos creado y no somos capaces de tener en cuenta a los demás. En este caso se vive en la ilusión de su personalidad social.
5º No hagas al otro lo que no quieres que te hagan a tí
Hay que buscar el equilibrio entre el amor de uno mismo y el amor de los demás, el respeto a si mismo y el respeto a los demás. No olvidar que alguien que no se quiere o no se respeta, tendrá muchos problemas para querer o respetar a los demás.
6º Reintegrar los valores femeninos en la empresa
La sociedad se ha basado en valores masculinos tales como la fuerza, la competición, la conquista, la ambición. Es tiempo de reincorporar en la empresa valores más femeninos tales como la protección, la colaboración, la comprensión. Y sobre todo la vulnerabilidad, que nos permite vincularnos con los demás, con nuestras debilidades y nuestras heridas lo que lleva a relaciones más cercanas de solidaridad y afecto.
“El objetivo es liderar sabiendo poner el ego a distancia”.
Para volver a ver el video dejamos enlace y para más información podéis poneros en contacto con noemi@kolokio.net