Es un honor darle la bienvenida a Eurokarpa como nuevos asociados. Para conocer más en detalle la empresa, hemos tenido el privilegio de hablar con Eduardo Zufiaur Ormazabal, responsable de la División Packaging.
¿Podría presentarnos brevemente un histórico de su empresa, los mercados para los que trabaja y las líneas que considera les diferencia de la competencia?
Eurokarpa lleva 4 décadas dedicándose a la transformación y comercialización de materiales celulósicos. Hemos evolucionado mucho desde las primeras fases en las que sobre todo manipulábamos papeles de otras empresas. En la actualidad, además de manipular para fábricas, generamos nuestro port-folio, fabricamos productos y representamos papeleras.
Esencialmente, podríamos decir que nos dedicamos a GENERAR RELACIONES DE CONFIANZA, con proveedores y clientes, aportando SOLUCIONES FLEXIBLES a las necesidades de PACKAGING e IMPRESIÓN DIGITAL TEXTIL, con materiales celulósicos.
Para ello, contamos con un equipo de profesionales motivado y dinámico, con amplia experiencia y conocimiento, y una comprometida actitud de servicio.
Disponemos de un centro de manipulación propio, una planta completa para atender las necesidades de nuestros clientes en corte, bobinado y presentación. Tenemos también, para el mundo online, una fábrica de bolsas. Disponemos de un Stock amplio, clave para nuestro negocio de Distribución, con un almacén de más de 10.000m2.
Actuamos en el Packaging con productos GC, de Kraft estucado y KLB, productos reciclados, y papeles MGs, primordialmente en los mercados cercanos de España, Francia y Portugal.
Estamos presentes en un mercado internacional de papeles para protección y transfer para la sublimación textil. Participamos en el mercado del sobre-bolsa para el mundo online textil. Disponemos de representaciones de papeleras en ventas directas a clientes sin pasar por nuestra manipulación o almacenes.
Y, por último, estamos atentos a la evolución de las necesidades de nuestros clientes y proveedores, para ir preparando la Eurokarpa del futuro, que lo mismo que la de hoy no es la de hace 30 años, es seguro que la de hoy es diferente también a la Eurokarpa de dentro de 10 años.
¿Qué perspectivas tienen, desde su empresa, sobre el desarrollo del año 2022/2023 y hacia dónde cree que va a evolucionar el mercado del PACKAGING en los próximos años?
Los años 22 y 23 han sido claramente anómalos y muy diferenciados:
El 22 se caracterizó por la falta absoluta de material en el mercado en todos los productos, fueran de papel o cartón. Fueran de fabricaciones locales, europeas o transatlánticas.
– La crisis de la cadena de suministros y el transporte internacional incrementaron la presión.
– Los costes energéticos (Gas, Electricidad, petróleo) tras el inicio de la guerra en Ucrania se alocaron. Como consecuencia, los precios del transporte dispararon los costes.
– El pánico al suministro disparó los pedidos, que se hicieron a múltiples proveedores y con programaciones a muchos meses vista, incluso sin precios definidos.
Fue la tormenta perfecta.
Todos los actores decíamos que teníamos todas las disponibilidades de material vendidas y que hubiéramos vendido mucho más de haber dispuesto de más material.
Toda esa burbuja debía tener un fin, pero todo el mundo preveía un desinflado más gradual y alejado en el tiempo, que como luego sucedió.
Para la última parte del 22, la situación había cambiado radicalmente:
- Los pedidos se pararon.
- Las fábricas seguían fabricando a tope sin nuevos pedidos, en base a los pedidos duplicados y triplicados en la fase de pánico.
- El transporte internacional comenzó a normalizarse
- Y el mercado de consumo real, no el ficticio, cayó.
- La tormenta perfecta del 22, continuaba con nubarrones de otros colores en el 23. Los stocks inundaron el mercado, los retrasos y anulaciones de las entregas de lo pedido en la fase de pánico marcaron el paso del 23. Los precios cayeron y nadie quería tener stocks a precios altos anteriores. La consigna era reducir stocks aun a costa de margen. Y eso en un mercado claramente más a la baja. Año duro y difícil.
Y, ¿qué se puede esperar para fin del 23 y año 24? Todos los pronósticos desde la COVID han sido erróneos, luego no es muy alentador adivinar o recibir como válidos las adivinanzas de los expertos. Pero de algún modo, tenemos que pensar en escenarios para gestionar nuestros negocios.
Con toda la prudencia expresada, observando y atendiendo a muchos actores del sector yo diría:
- Este último trimestre seguirá la pauta débil del resto del año 23.
- Existen muchos nubarrones de cara al 24:
- Guerra en Ucrania
- Guerra en Palestina-Israel y posible afectación a la zona rica en petróleo circundante, con lo que se incrementarán las tensiones sobre los precios y costes.
- Muchos otros conflictos regionales aparentemente disociados, pero quizás enmarcados en una partida de ajedrez global (Nagorni Karabaj, Sahel,….), que enrarecen, por utilizar un término aséptico, las relaciones comerciales.
- Inflación alta.
- Hipotecas altas.
- Consumo bajo.
- Desconcierto del mercado y usuarios/consumidores finales.
Por tanto, esperar una recuperación sana en el 24 no parece un escenario creíble. Yo apostaría por ponernos en los parámetros prepandémicos (Años 18 y 19), y de ahí recortar en un % las expectativas, % que no me atrevo a pronosticar públicamente, aunque juguemos internamente con ese dato. Apostaría también por una disponibilidad de material en el mercado, sin los aprietos del 22. Hemos de estar muy atentos a los precios energéticos y su derivada en los productos celulósicos.
Hasta ahí me decantaría. Mas allá no me siento con capacidad, datos y desparpajo suficiente. Hay en el mercado interlocutores más informados y conectados con las fuentes reales de información.
Su empresa forma parte de ASPACK ¿Qué cree que aporta la asociación a las empresas del sector y por qué cree que es importante formar parte de ella?
Empezamos con ilusión esta fase de pertenencia a la Asociación.
Queremos aportar y recibir contacto, opinión, información sobre el sector, “integradamente”, desde la madera y la pasta, hasta el consumidor final, pasando por los proveedores de papel y cartón, los manipuladores, los distribuidores, los fabricantes de estuchería, los usuarios del Packaging en sus productos y la Distribución hasta el cliente final.
Creo que al compartir das y te dan. Se estrechan lazos. Conocerse, rozarse, es avanzar en la confianza y en el desarrollo acompañado.
