“Para ser mejor comunicador hay que trabajar en ser mejor persona”

en El sector/Eventos por

La importancia de la comunicación en las empresas fue uno de los temas centrales del IX Congreso de ASPACK. Para tratar este tema, ASPACK contactó con Javier Cebreiros, doctor en comunicación y conferenciante, que habló sobre una forma diferente de entender la comunicación.

Su charla se centró en mostrar cómo la autenticidad y la emoción ayudan a comunicar mejor. “Las personas comunicamos lo que somos, no lo que parecemos”, aseguró. Por eso, añadió “para ser mejor comunicador hay que trabajar en ser mejor persona”.

Para desarrollar sus argumentos, Javier Cebreiros empezó hablando de los elementos que conforman la personalidad: el entorno social, las personas alrededor de cada uno y las experiencias vitales. “Todo el mundo tiene un bagaje y eso no lo podemos cambiar –afirmó–, pero podemos decidir qué tipo de pensamientos incluimos en nuestra vida. Y esto se puede entrenar, aprendiendo a ver las cosas buenas y dándoles importancia”.

26oct_JavierCebreiros3_IX-CONGRESO-ASPACK

Para ilustrar sus ideas, Javier Cebreiros utilizó pequeñas pelotas blancas para representar los pensamientos positivos y naranjas para representar los negativos. “Tenemos que empezar por aprender a hablarnos a nosotros mismos y por decidir qué tipo de pensamientos metemos en nuestras cabezas. Después podemos plantearnos qué tipo de pensamientos metemos en la cabeza de los demás”.

Todos estos argumentos tienen su aplicación en el mundo de la comunicación empresarial. “No podemos dirigir equipos y no atrevernos a comunicar”, aseguró Javier Cebreiros, porque la comunicación crea lazos entre las personas y ayuda a superar situaciones difíciles. “Cuando alguien tiene la cabeza llena de pensamientos negativos, necesita que alguien introduzca pensamientos positivos”.

Un buen director de equipos tiene que tener estos conceptos en cuenta y, sobre todo, necesita saber escuchar y practicar la escucha activa: “Si no escuchamos, no comunicamos bien”. “La mejor comunicación –concluyó Javier Cebreiros– es darlo todo. Mejorar lo que somos y no lo que parecemos”.